Genuine
El pintor Percy, después de completar el retrato de la sacerdotisa sanguinaria Genuine, queda tan hechizado que se encierra en casa y deja de relacionarse con otras personas.
El primero horror de la historia
En Montecarlo, una tímida chica inglesa disuade del suicidio a Max De Winter, quien había quedado viudo hace poco. Los dos comienzan a frecuentarse, se enamoran y, en poco tiempo, él le pide que se case con él.
La familia más sanguinaria del Oeste que inspiró parte de la película The Hateful Eight de Quentin Tarantino
En el barrio de Little Italy, Nueva York, el treintañero Charlie sueña con abrirse camino en el mundo del crimen gracias a la ayuda de un tío mafioso…
Frank Sheeran, veterano de guerra y camionero, se convierte en un sicario para la mafia de Filadelfia y es encargado de matar al popular sindicalista Jimmy Hoffa.
Años 30. Dos hermanos, gánsteres del crimen organizado de Nueva York, se reúnen durante el velorio del tercer hermano y recorren la historia de su familia.
Robert Berdella – El Coleccionista, conocido como El Carnicero de Kansas City, fue un asesino en serie y torturador estadounidense activo en la década de 1980. Entre 1984 y 1987, Berdella secuestró, torturó y asesinó al menos a seis jóvenes en su casa en Kansas City, Misuri. Su historia es particularmente impactante debido a la brutalidad de los crímenes y los escalofriantes detalles que salieron a la luz después de su arresto.
La trama gira en torno a la protagonista Laura, interpretada por Julia Roberts, quien intenta escapar del control obsesivo de su esposo Martin, interpretado por Patrick Bergin. La película explora de manera cruda y realista los aspectos oscuros y a menudo sutiles del abuso emocional y físico dentro de una relación conyugal. Martin es un esposo manipulador y violento que busca mantener un control total sobre la vida de Laura, aislarla del mundo exterior y amenazarla con violencia cada vez que intenta rebelarse.
En el oscuro firmamento del arte contemporáneo, Dari Zuron emerge como una estrella inquieta, capaz de esculpir la pesadilla con la misma gracia con la que otros trazan la luz. Sus obras, cargadas de simbolismos lúgubres y sugerencias góticas, parecen respirar en el limbo entre la muerte y la memoria, evocando figuras descompuestas, rostros perdidos en el silencio del olvido, escenarios crepusculares donde cada detalle exuda una belleza herida.