«El Castillo Encantado», conocido también como «The Haunted Castle» en inglés y como «Le Manoir du Diable en francés es un cortometraje francés de 1896 dirigido por Georges Méliès, uno de los pioneros del cine. La película fue producida en el período en que el cine aún estaba en sus comienzos y Méliès estaba experimentando con las posibilidades del nuevo medio.
El filme está ambientado en un antiguo castillo encantado por el diablo, interpretado por el mismo Méliès. La trama sigue a un grupo de personas que entran en el castillo y son aterrorizadas por las apariciones espectrales del diablo y otros fenómenos sobrenaturales. Méliès utiliza una serie de trucos cinematográficos innovadores para la época, incluyendo superposiciones de imágenes, transformaciones y descomposiciones ópticas, para crear los efectos especiales que hacen que la película sea tan espectacular y sorprendente para el público de entonces.
«El Castillo Encantado» es importante no solo por su contenido, sino también porque representa uno de los primeros ejemplos de cine de terror en la historia del cine. Méliès supo combinar la atmósfera gótica y el sentido de misterio típicos del género con su creatividad y talento técnico, creando una experiencia cinematográfica única y envolvente.
La película ha tenido un impacto duradero en la cinematografía e influyó en numerosos directores posteriores en el campo del terror y del cine fantástico. Su importancia histórica es reconocida como uno de los primeros ejemplos de narración visual en el cine y ha contribuido a definir el lenguaje cinematográfico que conocemos hoy en día.