El misterio de «2001: Una odisea del espacio y Pink Floyd a circulado durante muchos años, aunque nunca confirmado oficialmente, que la suite psicodélica «Echoes» de Pink Floyd fue escrita para ser incluida en la banda sonora de «2001: Una odisea del espacio», la obra maestra de Stanley Kubrick. 
Parece que Pink Floyd, grandes admiradores del director británico naturalizado, propusieron «Echoes» para la banda sonora de la película, pero recibieron un cortés rechazo, luego la publicaron en su álbum «Meddle» dos años después. 
También se dice que Kubrick, para su siguiente película, «La naranja mecánica», solicitó la canción «Atom Heart Mother» de Floyd, pero en este caso la banda rechazó la solicitud. (¿Una pequeña revancha?)
Pero volviendo a «Echoes» y «2001»: es increíble que si se inicia «Echoes» en el momento exacto en que comienza la secuencia de la Misión Júpiter, las imágenes y la música parecen sincronizarse de manera sorprendente, creando un efecto hipnótico y sinérgico. «Echoes» contiene sonidos que evocan la inmensidad del espacio, similares a los utilizados en la banda sonora de la película para las secuencias espaciales. Las ondas sonoras y los ecos en la canción reflejan el silencio inquietante y los ruidos ambientales de las escenas de la película. 
Podría ser casualidad, pero el efecto final es sin duda atractivo, misterioso y magnífico.
La sincronización entre «Echoes» y la secuencia de la Misión Júpiter sigue siendo un fenómeno intrigante que refleja la capacidad de la música y el cine para interactuar de formas inesperadas y profundas. Ya sea pura coincidencia o una conexión artística sutil, la experiencia de ver y escuchar estas dos obras juntas ofrece una dimensión adicional de aprecio para ambas, demostrando cómo la sinergia entre sonido e imagen puede crear algo más grande que la suma de sus partes.
Haz clic aquí para ver la secuencia de la Misión Júpiter de «2001: Una odisea del espacio» con la suite «Echoes» de Pink Floyd.
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