Hellraiser: Los que Traen el Infierno

Hellraiser: Los que Traen el Infierno

(Clive Barker, 1987)

«Hellraiser» es una película de terror de 1987 escrita y dirigida por Clive Barker, basada en su novela «Schiavi dell’inferno – The Hellbound Heart» de 1986. La obra es conocida por haber introducido al personaje de Pinhead, una figura icónica líder de una especie de demonios llamados “cenobitas” pertenecientes al universo de la serie de películas «Hellraiser».

La historia gira en torno a un antiguo rompecabezas llamado «La Configuración del Lamento», o «caja de Lemarchand», que cuando se resuelve, abre un portal hacia una dimensión demoníaca llamada «Infierno». El protagonista, Frank Cotton, resuelve el rompecabezas abriendo un vínculo con los Cenobitas, criaturas sadomasoquistas que provienen del Infierno. Sin embargo, Frank es torturado por los Cenobitas y reducido a un estado de no-vida. Posteriormente, su cuñada Julia, secretamente enamorada de él, descubre el ritual para revivir a Frank absorbiendo sangre humana.

Cuando Larry, el esposo de Julia, se muda a la casa familiar junto con su hija Kirsty, descubren accidentalmente el cuerpo resucitado de Frank. Kirsty, sospechando algo oscuro, comienza a investigar y se encuentra con el rompecabezas. Descubre el oscuro vínculo entre el rompecabezas y los Cenobitas, y trata de escapar de sus garras mientras buscan devolver a Frank al Infierno.

La película es conocida por sus imágenes gráficas y perturbadoras, además de por su representación del horror sexual y la oscuridad interior de la humanidad. «Hellraiser» dio origen a una serie de secuelas, spin-offs y adaptaciones en otros medios, pero la primera película aún es considerada un clásico en el género del terror por su originalidad e impacto visual.

Curiosidades y detalles adicionales

Clase 1952, nacido en Liverpool, desde pequeño Clive Barker se dedica a varias formas de arte: literatura, pintura, teatro, cine y cómic. Estudia en el College Art of Liverpool y a principios de los años ’70 se traslada a Londres, donde trabaja como dibujante (ilustrador) para novelas pornográficas, antes de convertirse en dramaturgo de extrañas representaciones teatrales, basadas en personajes célebres del cómic insólitamente mezclados con demonios y en contextos grandguignolescos.

En 1983 comienza a escribir novelas y cuentos de horror que lo hacen apreciar por el público y la crítica. Entre los lectores, también un entusiasta Stephen King, quien dijo: «He visto el futuro del horror, su nombre es Clive Barker».

Después de la famosa serie «Books of Blood», el artista se dedica a la dirección, decidiendo ocuparse de la adaptación cinematográfica del cuento The Hellbound Heart (Hellraiser, 1987).

Desafortunadamente, el excelente debut no tendrá seguimiento, ya que aparte de los guiones de los capítulos siguientes y el clamoroso fracaso de Cabal (definido como el Star Wars del horror por la imponente cantidad de efectos especiales), algunas películas basadas en sus escritos, como Underworld y Rawhead Rex, son realizadas por un director incompetente como George Pavlou.

Barker también fue amigo de Lucio Fulci, tanto que el director italiano cierra Voci dal Profondo con una dedicatoria personal.

Otras curiosidades

Clive Barker dixit:
«En Hellraiser, el cliché de la desintegración, de la disolución física, que constituye un sello distintivo de la cinematografía de horror, está exactamente invertido. Aquí los cuerpos se recomponen, capa tras capa».

Clive Barker dixit 2:
«Lucio Fulci es un genio. El mejor. Su L’Aldilà es una de mis películas de culto».

Durante una fiesta celebrada para conmemorar el final del rodaje, Doug Bradley (Pinhead) se encontró ignorado por todos los demás miembros del equipo y del reparto. Pensando en la camaradería que tuvo con todos durante el rodaje, se sintió profundamente decepcionado y consternado. Mucho después se dio cuenta de que aparte de Barker y los responsables de los efectos especiales, nadie del equipo lo había visto nunca sin maquillaje, y por eso nadie fue capaz de reconocerlo en la fiesta.

El título de la película originalmente debía ser el mismo que el de la novela de Barker, The Hellbound Heart (Schiavi dell’inferno en italiano). La producción decidió que ese título daba una fuerte impresión de un drama sentimental y pidió a Barker que lo cambiara. Barker propuso Sadomasochisti d’Oltretomba, que fue rechazado por su contenido sexual explícito. Exasperado, propuso a una mujer de sesenta años del equipo de producción Cosa è disposta a fare una donna per una bella scopata.

El personaje de Doug Bradley se llamaba Priest en los primeros borradores del guion, para luego convertirse en Capo Cenobita en el guion final. Pinhead no era más que un apodo dado apresuradamente por el equipo para identificar a la figura. Prevaleció y funcionó, siendo usado para las siguientes secuelas. Barker odió ese nombre, considerándolo degradante y no en línea con la austeridad eclesiástica de los Cenobitas; en el cómic de Hellraiser producido en 2011 para BOOM!, lo renombró Priest, anunciando que revelaría su verdadero nombre de Cenobita en un trabajo futuro. De la misma manera, la Cenobita fue llamada Gola Profonda en el set, debido a la predominante vis sexual del personaje; aunque este apodo estaba a punto de convertirse en el designado para siempre, permaneció como la Cenobita en las secuelas venideras.

Muchos espectadores se quejaron de la pobreza de los efectos especiales al final de la película. Barker explicó que debido al presupuesto muy limitado, no quedaba dinero para destinar a los profesionales de los efectos especiales, así que él y un no identificado «tipo griego» animaron a mano estas escenas durante un fin de semana. Barker se declaró satisfecho con el resultado final, considerando la cantidad de alcohol consumido por los dos durante el trabajo.

Clare Higgins odiaba las películas de terror. Cuando vio la película en el estreno, abandonó la sala a los 10 minutos, muerta de miedo. Nunca ha logrado ver la película completa.

A Doug Bradley se le pidió originalmente que eligiera entre el papel de uno de los dos mozos que transportan el colchón y el jefe de los Cenobitas. Inicialmente prefirió el papel menor porque consideraba importante ser reconocido por el público.

The Chatterer y Butterball tenían partes de diálogo en el guion original. Cuando el maquillaje hizo imposible que los actores pronunciaran frases comprensibles, sus líneas fueron pasadas a la Cenobita femenina y especialmente a Pinhead, lo cual contribuyó a consolidar su reputación como marca de la saga.

Andrew Robinson convenció a Clive Barker de reemplazar «Fottiti!» con la maldición que finalmente quedó en las tomas, «Jesus wept!» (al parecer ausente en la versión italiana; la exclamación, que literalmente significa «Jesús lloró», es blasfema y equivale aproximadamente a una famosa blasfemia italiana).

La idea de un cubo usado como portal de los infiernos se basa en una leyenda urbana, que trata sobre la existencia de una estructura cúbica de tamaño humano de ubicación imprecisa, cuyas facetas internas son espejos creando seis abismos en tiro cruzado. Según la leyenda, quien se encierra dentro experimentará fenómenos tan inquietantes que dañarán permanentemente su equilibrio psíquico.

Para economizar el presupuesto, el estudio tenía la intención de contratar a dobles de riesgo para interpretar a los Cenobitas. Barker insistió en que los interpretaran actores profesionales, argumentando que aunque los personajes son mudos y están fuertemente maquillados, su lenguaje corporal fruto de estudios conferiría al conjunto una fuerte personalidad.

El presupuesto fue de un millón de dólares. La película recaudó unos 20 millones.


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