Reino Animal
de David Michod (2010)
Un chico, que se queda huérfano de madre, se va a vivir a Melbourne con su abuela y sus tíos,
en una de las familias criminales más temidas de la ciudad.
Pronto se verá envuelto en una sangrienta guerra contra la policía local.
Cita.
“𝘓𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘰𝘴 𝘤𝘳𝘪𝘮𝘪𝘯𝘢𝘭𝘦𝘴 𝘥𝘦𝘣𝘦𝘳𝘪́𝘢𝘯 𝘴𝘢𝘣𝘦𝘳, 𝘲𝘶𝘦 𝘥𝘦𝘣𝘦𝘯 𝘴𝘢𝘣𝘦𝘳, 𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦 𝘢𝘤𝘢𝘣𝘢𝘯 𝘮𝘢𝘭, ¡𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦!
𝘋𝘦 𝘶𝘯𝘢 𝘮𝘢𝘯𝘦𝘳𝘢 𝘰 𝘥𝘦 𝘰𝘵𝘳𝘢…
𝘕𝘰 𝘭𝘰 𝘴𝘦́, 𝘮𝘦 𝘱𝘢𝘳𝘦𝘤𝘪́𝘢 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘳𝘢𝘳𝘰, 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘦𝘯 𝘦𝘭 𝘧𝘰𝘯𝘥𝘰 𝘯𝘪 𝘵𝘢𝘯𝘵𝘰, 𝘯𝘰 𝘴𝘦́ 𝘴𝘪 𝘮𝘦 𝘦𝘹𝘱𝘭𝘪𝘤𝘰: 𝘭𝘰𝘴 𝘤𝘩𝘪𝘤𝘰𝘴 𝘴𝘦 𝘦𝘯𝘤𝘶𝘦𝘯𝘵𝘳𝘢𝘯 𝘥𝘰𝘯𝘥𝘦 𝘴𝘦 𝘦𝘯𝘤𝘶𝘦𝘯𝘵𝘳𝘢𝘯 𝘺 𝘩𝘢𝘤𝘦𝘯 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘢𝘤𝘦𝘯, ¿𝘤𝘭𝘢𝘳𝘰?
𝘠𝘰 𝘮𝘦 𝘦𝘯𝘤𝘰𝘯𝘵𝘳𝘢𝘣𝘢 𝘢𝘩𝘪́ 𝘺 𝘦𝘴𝘵𝘰 𝘦𝘳𝘢 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘢𝘤𝘪́𝘢, 𝘥𝘦𝘴𝘱𝘶𝘦́𝘴 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘮𝘶𝘦𝘳𝘵𝘦 𝘥𝘦 𝘮𝘪 𝘮𝘢𝘥𝘳𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘦𝘳𝘢 𝘦𝘭 𝘮𝘶𝘯𝘥𝘰 𝘢𝘥𝘰𝘯𝘥𝘦 𝘩𝘢𝘣𝘪́𝘢 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘥𝘰.»
(𝐉𝐨𝐬𝐡𝐮𝐚 ‘𝐉’ 𝐂𝐨𝐝𝐲)
𝐀𝐁𝐔𝐄𝐋𝐀 «𝐏𝐈𝐓𝐔𝐅𝐈𝐍𝐀».
Janine Cody, es decir abuela “Pitufina”, es quien hace de enlace para toda la familia, la matriarca alrededor de la cual todo gira y encuentra justificación.
A esta mujer de unos sesenta años no le importa si sus hijos han alcanzado cierta edad y tienen una carrera criminal bien establecida: para ella son y siguen siendo cachorros a proteger a toda costa y a tratar con dulzura.
Así que, cuando sea necesario, está lista para volverse letal y despiadada para defenderlos contra cualquiera que pueda causarles algún daño.
No importa dónde esté la razón y dónde esté la culpa, no interesan los crímenes cometidos: lo importante es la conservación de la especie.
Así funciona en el reino animal y así funciona en casa Cody.
Consideraciones.
El director, inspirado por un hecho de crónica de 1988, lleva a escena un drama familiar despiadado.
Mezcla elementos típicos de las películas de gánsteres, como los tráficos delictivos de los protagonistas, su universo doméstico y el desafío abierto y violento contra las fuerzas del orden.
Algunos críticos han hecho comparaciones importantes y halagadoras con nombres del calibre de Scorsese y Mann.
En realidad, creo que la fuerza de esta película reside en la búsqueda constante de un estilo personal, en muchos aspectos cercano al documental.
No sorprende si se piensa que Michod nace como reportero de investigación.
Se usa un método analítico, se ponen en relieve las dinámicas que mueven a los protagonistas, para tratar de explicar cómo el miedo, la corrupción y el instinto de supervivencia pueden llegar a borrar cualquier sentido de moral.
Y así se explica la comparación con el mundo animal explicitada en el título.
Una película de tonos oscuros, dominada por un pesimismo cósmico, con poca violencia mostrada, pero con un crescendo de tensión y ansiedad muy acertado.
A esto se suma un elenco de actores que se meten perfectamente en sus respectivos papeles, en el que destacan, sobre todo, Ben Mendelsohn (Tío Pope) y Jackie Weaver (Janine Cody), quien obtuvo la candidatura al Oscar como mejor actriz de reparto.
Animal Kingdom es una película realmente bien construida y recomendada para quienes aman el cine de género.
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